Augusto Von Graëvenitz, vicecónsul del Imperio Alemán en Paysandú, fue asesinado el 18 de setiembre de 1875. El móvil del crimen fue la venganza.
Poco tiempo antes del trágico suceso Von Graëvenitz había denunciado a Diego Dungey, quien a la postre sería su matador, como autor del asesinato de Diego Busch, un compatriota suyo que se desempeñaba como puestero en la estancia Bichadero, propiedad de la compañía anglo-belga-germana Liebig´s Extract of Meat Company Limited.
El crimen de Von Graëvenitz generó una airada protesta del Imperio Alemán. De hecho, como forma de presión, el cónsul en Montevideo del gobierno de Guillermo I se trasladó a Paysandú en una cañonera de guerra de su país.
Unos meses después Diego Dungey fue capturado, juzgado y fusilado.
Para recordar al vicecónsul el gobierno de Uruguay levantó un panteón en el Cementerio Central de Paysandú. El 1 de noviembre de 1876 los restos de Augusto Von Graëvenitz fueron trasladados a ese lugar. Y allí permanecen, en una urna de mármol, pese a que la sepultura, abandonada desde hace décadas, ha sido parcialmente vandalizada.
Las imágenes fueron realizadas en el mes de julio de 2013 y corresponden al Cementerio Central de Paysandú, en especial al panteón de Augusto Von Graëvenitz.